sábado, 17 de marzo de 2012

Dios no Descansa

Solemnidad de San José-Día del Seminario 2012

Aunque podríamos considerar que en la actualidad nuestra diócesis, comparada con las diócesis de nuestro entorno, está a un notable nivel respecto al número de vocaciones, “la falta de sacerdotes es ciertamente la tristeza de cada iglesia” (J.P.II Discurso final al Sínodo 27-10-1990). Es incluso posible que muchas de nuestras comunidades cristianas no hayan captado aún el alcance de la crisis vocacional que padecemos y aceptado la responsabilidad que todos tenemos para orar y trabajar a favor de las vocaciones.

Las vocaciones nacen donde hay vida, por lo que es prácticamente imposible que surjan vocaciones donde no haya comunidades cristianas realmente vivas. Pero el Señor sigue llamando. Nuestra confianza no nace de nosotros mismos, de nuestras capacidades, sino de la convicción de que el Señor, que es más grande que toda dificultad, no dejará a su pueblo sin pastores. Esta convicción ha de animar todo nuestro trabajo vocacional.

Y comenzar este trabajo mendigando. “Rezar a Dios, llamar a la puerta, al corazón de Dios para que nos dé vocaciones; rezar con gran insistencia, con gran determinación, con gran convicción también, para que Dios no se cierre ante una oración insistente, permanente, confiada, aunque deje hacer, esperar, como a Saúl, más allá de los tiempos que nosotros hemos previsto” (B. XVI Vigilia de clausura del año sacerdotal 10-6-2010).

Si nos atenemos al momento actual, podemos afirmar que el Señor sigue bendiciendo el trabajo de la Pastoral Juvenil y Vocacional que se realiza en nuestra diócesis y sigue haciendo el milagro que supone el don de una nueva vocación que llega al Seminario.

“Del amor de Dios nacen y crecen todas las vocaciones…es importante que se creen en la Iglesia las condiciones favorables para que puedan aflorar tantos “si” en respuesta generosa a la llamada del amor de Dios…y que las Iglesias locales sean un ‘lugar’ de discernimiento y de profunda verificación vocacional, ofreciendo a los jóvenes un sabio y vigoroso acompañamiento espiritual (Mensaje de Benedicto XVI para la jornada mundial de oración por las vocaciones).

José Luis Retana Gozalo
Antonio Collado Montero
Gaspar Hernández Peludo 
Formadores Seminario de Ávila 

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