sábado, 21 de marzo de 2015

Las Cuatro Formas de Regar el Huerto de una Vocación


En el libro de la Vida, Sta. Teresa de Jesús expresa las etapas de su camino de oración inspirándose en cuatro formas de regar el huerto. Partiendo de esa imagen, nuestros seminaristas del Menor en Familia presentan las cuatro formas como ellos riegan el huerto de su vocación en el Seminario:


LA ORACIÓN

La oración acompaña el ritmo de nuestros encuentros. El sábado por la noche, después de ver una película rezamos todos juntos completas, y el domingo por la mañana, nada más levantarnos, antes de desayunar rezamos laudes. Por otra parte, los sábados a última hora de la tarde recogemos en una oración la temática de la formación del fin de semana, en la cual hacemos un gesto de acción de gracias, sacrificio o petición. Así, un día dejamos nuestras zapatillas ante el altar como gesto de agradecimiento; otro, dejamos algunos objetos nuestros como sacrificio para reconocer a veces nuestra dependencia de ellos y educarnos al desprendimiento.

Iñaki de Navascués y Sergio Velayos

LA FORMACIÓN

Durante este curso hemos recibido formación acerca de las virtudes, del discernimiento vocacional, de cómo realizar la oración y sobre las vidas de algunos santos. Últimamente nos hemos centrado en la figura de Sta. Teresa de Jesús con motivo del V Centenario de su nacimiento, junto a los grupos vocacionales Samuel y Miriam. Nos han ayudado a esto los formadores del Seminario, P. Gaspar y P. Raúl, y nos han servido para crecer mucho humana y espiritualmente.

Manuel Sánchez y Álvaro Macías

EL ESTUDIO

En el Seminario en familia no descuidamos el tiempo de estudio, en el cual afrontamos nuestras tareas para llevar adelante el curso. Los tiempos dedicados a estudiar dependen del momento del curso en que estemos (exámenes o no). También contamos con la ayuda de los demás (de los compañeros, formadores o de Rodrigo, el seminarista mayor que nos acompaña) cuando encontramos alguna dificultad en nuestros temarios y deberes. Todo ello nos ayuda a aprender muchas cosas y crecer en la disciplina para cuidar nuestra formación humana.

Alejandro Galindo y Álvaro José Sánchez

LA CONVIVENCIA

Entre ratos de estudio, formación y oración tenemos también muchos momentos de ocio y convivencia, donde descansamos juntos jugando a diversos juegos, como el ping-pong, el futbolín, el parchís, el tabú, etc. También dedicamos tiempo al deporte, echando un buen partido de baloncesto o fútbol, pues al espíritu y la mente sanos se debe unir un cuerpo en forma. Las noches de los sábados solemos ver una película con valores. En el Seminario en familia experimentamos cada día la alegría de crecer unidos y buscar juntos lo que quiere Dios de nosotros.

Javier Sánchez y Miguel Rodríguez

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